Trilogía "Una vida oculta"
Inglaterra, época actual. Nathan Byrn sabe que no es como los demás. Aunque su madre era una respetada Bruja Blanca, su padre pertenece al linaje de los temibles Brujos Negros, lo cual hace de él un ser dividido que se debate entre la luz y las tinieblas. Este origen no le permite integrarse plenamente a la comunidad Blanca, la cual lo trata con desprecio y recelo. El hecho de que Nathan sea, además, hijo de Marcus, el más temido y odiado de los Brujos Negros, sólo sirve para empeorar su situación. El Consejo de los Brujos Blancos ha decidido someterlo a un control brutal para evitar que su lado sombrío se imponga. No obstante, llega el momento en el que Nathan decide convertirse en el dueño de su destino: será él y nadie más quien determine su camino.
Sobre el libro...
¿Que decir sobre esta primera parte de la trilogía de Sally Green?
Me encanto.
Fue uno de esos libros que, cuando los terminas, los cierras y te quedas mirando el techo con cara de boba. Como diciéndole al techo ¿techo, que chucha?
Demasiados sentimientos me causo, ¡y eso que solo es el primero!
La forma en la que relata las cosas la autora, la encontré fascinante, ya que aquí los brujos blancos no son un pan de dios o las personas aburridas que uno esperaría: son unos cabrones.
Que. Manera. De. Odiarlos.
Por dios.
Te dan unas ganas de matarlos a palos a todos.
Los brujos negros no es que sean unos mansitos, pero les juro que los prefería mil veces más que los blancos.
Para empezar, tenemos a nuestro protagonista Nathan, quien es un brujo mitad negro, mitad blanco, que ha vivido toda su vida con su familia materna -familia de brujos blanco.
Ahí es donde empieza mi odio hacia los blancos, ya que sus líderes tienen complejo de "nosotros somos mucho mejores que el resto. Ni los mestizos ni los negros nos son relevantes, y la vida sería mucho mejor si los exterminamos a todos".
Tanto así, que tenían un ejercito de brujos entrenados para atrapar, torturar y matar brujos negros. Tipo: te encierro porque eres un brujo negro. ME VALE QUE NO SEAS MALO.
Y tu tipo: ¿Que. Chucha? ¡Se supone que los brujos blancos son buenos!
Pues nop, en este libro no.
Nuestro protagonista es una persona que ha sufrido demasiado en la vida por el simple hecho de que ser el hijo del brujo negro más temido y buscado: Un asesino.
Siendooo que su mamá fue una bruja blanca muy respetada en su comunidad.
Toda su vida, le hacen creer a Nathan que su mamá se suicido por la vergüenza que le provocó haber tenido un hijo con un brujo negro, cosa que su desagradable hermana Jessica se asegura de recordarle siempre que puede.
Jessica es un personaje completamente desagradable dentro de la novela, ya que, si bien Nathan tiene dos hermanos más, -o hermanastros- ella es la única que lo odia realmente con todo su ser.
Nunca se sabe muy bien cual es el verdadero odio que hay detrás, porque es algo realmente impactante.
¿Como le tienes odio a un niño que nunca ha hecho nada malo?
Sus otros hermanos son geniales. Lo quieren mucho y se preocupan de que este bien, al igual que su abuela, quien siempre le demuestra su lealtad y cariño a Nathan, y tu piensas "cute, si hay gente que te quiere mucho. Si hay gente que apuesta por ti".
Ahora, el problema es que todos lo ven a el como el antagonista por ser el hijo de Marcus,-brujo negro muy malo-, y de cierta forma lo "utilizan" toda su vida para tratar de manipularlo y convertirlo en un títere a su disposición, pero, ¿en serio la forma en la que actuaron fue la mejor que se les ocurrió para que el los ayudara?, ¿en serio?
Aquí te cuestionas la inteligencia de las personas, claramente.
Vemos como le quitan a Nathan todo lo que quiere y necesita para ser feliz, reduciéndolo a una conciencia que ya no sabe muy bien que hacer.
Pero que tiene un plan.
"El truco es que no te importe"
Siento que, pese a ser un libro de ciencia ficción, es super fuerte. Tiene varios temas que te dejan realmente para dentro, como lo fácil que puedes hundir a una persona, lo fácil que puede ser hacer que una persona buena, se transforme en algo que nunca quizo o que nunca estuvo en sus planes ser.
Hay injusticia, rabia y decepciones.
Muchas personas conspiran en contra de Nathan en este libro, lo que le hará tener que reflexionar sobre quien confiar.
Donde ir.
¿A quien acudir?
La abuela de Nathan, por un lado, es una persona que hará de todo para que su nieto tenga la infancia que se merece.
Le escondera cosas por "su propio bien", y tratará de hacer todo lo posible para que el se sienta "normal", dentro de todo.
Me conmovió demasiado ella.
Analisse es una bruja puramente blanca, con una familia más blanca que el papel por así decirlo, que tiene dos hermanos idiotas y matones, al igual que Jessica, la hermanastra de Nathan.
Ella es una de las pocas personas al inicio del libro que pueden ver el lado bueno del protagonista, lo que hace que llame la atención de Nathan desde el día uno.
Ella no se aleja de el. No evita su mirada, y mucho menos lo deja con la palabra en la boca.
Ella se pinta una imagen de Nathan muy diferente del resto: ella quiere verlo blanco.
Gabriel es un personaje que aparece casi al final del libro, pero que amas nada más leer un par de lineas.
Todo en el causa curiosidad, y es muy diferente a todo lo que estaba acostumbrado el protagonista: No reacciona a sus ofensivas, no lo juzga ni lo mira con desaprobación o como si el fuera el peor ser humano en la tierra.
Simplemente es Gabriel.
Un personaje completamente leal con mucho misterio a su alrededor, o eso me pareció a mi cuando lo leí, ya que constantemente tenia ganas de saber cual era su historia -Hay un libro anexo que se llama el lado real, que es muuuuy bueno, que habla de la vida de Gabriel antes de encontrarse con Nathan, y es desgarrador. Léanlo una vez terminado El lado Oscuro-.
En general, es un muy buen inicio a una trilogía que yo personalmente tomaría como psicología.
Realmente me dejo varias cosas dando vueltas por la cabeza, ya que Sally Green me hizo sentir todo lo que el protagonista sufrió y sintió en la historia.
Recomendado al 100%.
Nathan se lanza a una frenética carrera para salvar su vida, mientras la guerra emprendida por los Brujos Blancos contra los Brujos Negros se vuelve aún más despiadada.
Los Brujos Blancos lo persiguen, los Brujos Negros lo odian.
El don de su temido padre es un nuevo y salvaje poder que amenaza con adueñarse de Nathan. Debe encontrar a la chica que ama, la misma que quizá lo traiciono. En la guerra entre brujos blancos y negros y con su lealtad dividida entre ambos bandos, Nathan tendrá que decidir a quién matar, en quien confiar y a quién amar.
Sobre el libro...
Debo admitir que ese libro me dejo en shock.
Cuando lo termine de leer, ya eran las dos de la mañana, y yo realmente no necesitaba dormir, ¡necesitaba respuestas! (no me acuerdo de donde es eso, pero es lo mejor me definió esa noche).
Malditas librerías y sus horarios diurnos.
Si bien el libro empieza un poco extraño, como el primero, que tu quedas como ¿que estoy leyendo?, te das cuenta en un par de paginas y quedas como "oh baia" jajaja
Sally describe tan bien lo que se siente ser el animal que hay dentro de Nathan, que tu realmente puedes empalizar con el y con todo lo que eso conlleva que a fin de cuentas, es algo que el protagonista odia: Nathan no es un asesino. Nunca quizo serlo.
"La palabra salvaje es interesante. Pensamos que lo salvaje no está domesticado y que se halla fuera de control pero la naturaleza no es así, por supuesto; la naturaleza es controlada, ordenada, extremadamente disciplinada en todos sus elementos..."
Pero aqui las circunstancias lo obligan a poner a prueba todo lo que el creía correcto, y la diferencia de "bueno" y "malo" que el tenia se desdibuja tanto, que ya no sabe donde empieza uno y termina el otro.
En este libro Nathan esta tan lleno de dudas y de tormentos, que lo convierten en una especie de carbón con algunas cosas que dice o hace, sobretodo a la gente que esta con el y que lo aprecia, como es el caso de Nesbit. Un personaje que, si bien se tira un par de comentarios que el piensa que son "chistosos o inofensivos" para alegrar un poco o fastidiar a Nathan, no es una mala persona, y Nathan lo trata pésimo en el libro.
Alguna veces me hubiera gustado poder pararle los carros, pero bueno. Igual, yo estando en su lugar, con todo lo que he vivido, probablemente igual sería bastante carbona, por muy injusto que me parezca ahora.
"...veo mi mano y todas las cicatrices que tiene y el tatuaje negro y quiero gritarle a Nesbitt que me dolió, que cada cicatriz que tengo dolió, y que mi cuerpo esta cubierto de cicatrices que sanaron rápidamente pero que todas me dolieron, y no puedo decir de ninguna de ellas que "no paso nada".
En este libro, Nathan descubrirá quienes son las personas que realmente estarán para el, tanto en las buenas, y especialmente en las malas.
Habrá traiciones que, no se si realmente sorprenderán, pero que para Nathan, serán como una cuchillada en el corazón...
Habrá traiciones que, no se si realmente sorprenderán, pero que para Nathan, serán como una cuchillada en el corazón...
Aparecerán personajes antiguos que -por increíble que parezca- comenzaras a personar y apreciar, o si bien no se si apreciar, al menos si a aprender a respetar.
"Si lo piensas, el optimismo es bastante enfermizo".
Gabriel demuestra ser un pilar fundamental en su vida, ya que pese a todo, es una de las personas que nunca le fallo.
La amistad y la confianza que se crea entre estos dos personajes la encontré HERMOSA.
Tanto, que te hace realmente replantearte todo.
Él no solo ve su lado de brujo blanco y lo acepta; el también ve su lado negro, y lo acepta por lo que es.
Intensamente lucha con demostrarle a Nathan que el es mucho más que blanco o negro, y demuestra ser una de las únicas personas que realmente se preocupan por él. Por su alma, su conciencia, por todo lo que en estos momentos a Nathan le parece un verdadero infierno.
Intenta hacer que se replantee ciertas cosas, y no se desanima cuando éste decide ignorarlo: sigue siempre junto a él.
"-Lo mataste como lo haría un animal. Sé que eso podría no ser un consuelo para ti, pero el animal actúa por instinto. Un animal no es malvado, no es ni bueno ni malo."
"-No soy blando.
-Lo eres, pero no te preocupes. Es una de las cosas que más me gustan de ti".
Los ame a los dos, y realmente encontré que podrían ser la pareja perfecta, por que Gabriel ha sido la única persona que ha visto a travez de Nathan, que sabe todo lo que lo atormenta, y que sabe que decir en el momento justo.
Es uno de los pocos que no le tienen miedo, y que estaría a su lado siempre.
"-¿Quien quiere lo divertido cuando se puede tener lo interesante?
"- Me quedaré contigo siempre; iré a donde vayas siempre. No quiero estar en ningún otro lado. Si vas a buscar a Mercury, entonces yo iré también. Si quieres que te ayude a liberar a Annalise, entonces lo haré".
"-Miro a Gabriel. Esta sentado en un cojín plano, como yo.
Tiene el pelo metido detrás de las orejas. Es guapo y valiente y gentil e inteligente y gracioso: el amigo más perfecto. He tenido pocos amigos...Y se que él es uno de los que mejor me conoce, que cree más en mi. Ni Arran confiaba en mi como lo hace Gabriel".
Van es otro nuevo personajes que me ha encantado: es completamente intrigante.
Es una bruja negra que le da igual trabajar con brujos blancos, mestizos o lo que sea, si es por un bien mayor: Ella no cree en eso, cree que, si vale la pena, hay que intentarlo.
Marcus es un personaje que en mi opinión, falto desarrollar.
Hay demasiadas cosas sobre él que siento que son fundamentales para el protagonista.
Me faltaron momentos o charlas padre / hijo.
Annalise... es de esos personajes que empiezan gustando, pero que terminas odiando así pero con tu vida.
No hablaré mucho de ella, porque sería el medio spoiler y vaya que si lo sería.
"Es difícil entender cuales son las verdaderas intenciones de la gente, ¿y sabes que es lo más complicado de toso? Que la gente cambia, Nathan.
Las personas cambian".
Odie y ame este libro en partes iguales.
Realmente me destrozó el corazón, y cuando entiendes la portada, como que te da algo.
En este libro Nathan esta realmente fuera de si: descontrolado, haciendo estupideces y creyendo que es invencible.
Ya nadie puede razonar con el, y la verdad es que a muchos ya les da miedo su sola presencia.
Si los prejuicios hacia Nathan en el libro anterior eran muchísimos, sobretodo por su forma de luchar, aquí se van a otro extremo.
Realmente la gente ajena a Nathan no entiende como puede ser tan salvaje, tan frío y despiadado, y aquí entran los personajes que amo: los que lo defienden pese a todo.
Vemos a Greatorex, uno de los personajes que toma las riendas del campamento en el que se encuentran Nathan y Gabriel para entrenar a todos los que pueda.
La ame, porque siempre cree en Nathan, y le da lo mismo lo que diga la gente: es una buena líder.
Celia es otro de los personajes que me gustan mucho, pese a todo lo que pasaron ella y Nathan en el libro uno, siento que tanto en el Lado Salvaje como en este libro, se redime completamente: ella, de cierta forma se ve como responsable de Nathan.
Siente que le debe algo.
¿Y como no?
En fin, en este libro todos dependen de Nathan, pero ¿realmente les importa lo que pueda pasarle a el?
Gabriel, una vez más, intenta de hacer que abra los ojos y que se vayan a cualquier parte, a la que sea, pero que dejen todo atrás, y por una parte, encuentro que es lo mejor que podrían haber hecho, digo ¿es que acaso el protagonista no ha sufrido demasiado? ¿no es sano que uno se rinda de vez en cuando?
Pero Nathan, pensando eso mismo que dije, decide darles pelea a todos los que han sido injustos en su vida; a todos los que lo hicieron pasar un infierno, para que nadie más lo vuelva a pasar, pero también, por venganza.
"-Has estado fuera mucho tiempo. ¿Acaso estabas perdido?
-Herido, pero no perdido".
La venganza en este libro esta muuuy marcada, y aunque yo siempre he sido participe de que "la venganza nunca es buena, mata el alma y la envenena" como dice mi nona :3, aquí ese valor mío se va a la mierda jajaja.
Claro que ¿cuanto más va a perder Nathan por cumplir su venganza?
¿Realmente vale la pena?
Yo creo que no, hablando sentimentalmente.
"Quiero que hable conmigo, quiero ser normal. Pero no lo soy. No puedo serlo. Y todo es culpa de ella".
Me pasa que no si pueda culpar al 100% a Annalise, porque, si bien fue una estúpida e impulsiva, Nathan ya tenía todos esos tormentos desde antes, y Gabriel, siendo realistas, le dijo una y otra vez que ella solo veía su parte Blanca, y que nunca lo vio por como el era realmente: tanto blanco como negro.
"-...Estoy cansado de tu venganza, tu ira, tu odio. La guerra te está aniquilando. No a tu cuerpo, sino a tu mente, tu alma. Has cambiado. Siento que estoy perdiéndote. O estás perdiéndote a ti mismo[...] no necesitas nada de eso. Lo que necesitas es alejarte por completo. Regresar a la naturaleza como lo hemos hecho estos últimos días, antes de que la guerra te convirtiera en otra persona...en alguien malo".
Vemos mucha más tensión en este libro entre Nathan y Gabriel, porque, como mencione, la sed de venganza de Nathan lo están llevando a limites que nunca había cruzado, y Gabriel, siempre fiel, realmente ya no sabe que hacer para no perderlo, o para que el no se pierda.
Hubo muchas veces en las que le quería gritar al protagonista ¡Deja de ser un carbón con mi Gabriel, es el único que realmente te quiere y se preocupa por ti! Gilipollas...
"Temo que no te detendrás y te perderás por completo. Y luego yo también llegaré a temerte".
"Y luego recuerdo lo que podría hacer. Es fácil. Podría matarlos a todos".
Sobretodo porque muchas veces el mismo sabia que estaba haciendo algo mal, y sabia que se debería disculpar, pero le cueeeesta al hombre perder perdón. Vemos como se arrepiente de haber hecho ciertas cosas, y todas relacionadas con Gabriel y su conciencia y es como awww, los amo. Realmente.
Aparecen otros personajes en el transcurso, que hacen sacar el lado bueno de Nathan, y ¡Bang!, más traiciones. Hasta. Cuando. Por dios.
¿El chico trata de hacer las cosas bien, aunque sea a su manera atolondrada, y la gente a su alrededor sigue traicionándolo?
Parece tragicómico.
Sin duda es un libro buenísimo que te obliga a leerlo de principio a fin en un día: yo no lo pude soltar.
Y, al terminar, tuve que volver a leer ciertas partes una y otra vez, porque simplemente no me lo podía creer.
Es poético si lo piensas y le das más vueltas, pero te deja con esa sensación de vacío que se produce al terminar un libro especialmente bueno, con un final alucinante.
"-...en cualquier batalla, se presentan diversos problemas y que siempre se le podían ocurrir cincuenta cosas que podrían salir mal. El quincuagésimo primer problema era algo distinto del resto: siempre estaba ahí, pero era incapaz de pensar cuál podría ser".
"Hay un río y árboles y colinas bajas, y se oye el trinar de los pájaros, y el sol calienta mi piel. Es un lugar hermoso. Un lugar donde siempre soñé estar. Y estoy con Gabriel y él está conmigo".
Después de que la Alianza quedara prácticamente destruida, Nathan se vio obligado a ser partícipe del más doloroso crimen. Ahora su sed de venganza es cegadora. No le deja dormir, sus visiones están bañadas en sangre y no descansará hasta aniquilar a todos los que han hecho de su vida un infierno.
Pero como ha sucedido desde el principio, Nathan tendrá que tomar partido,
no sólo en el combate final entre los dos bandos enfrentados en el exterior, sino también entre los dos lados que luchan dentro de él.
De su decisión dependerá lo que ocurra, y sólo él tiene el poder para que todo arda o para que una esperanza pueda nacer.El lado perdido es el explosivo final de la trilogía Una vida oculta.
Sobre el libro...
"El mismo ser humano es, en distintas edades, en distintas circunstancias , alguien completamente diferente. A veces es casi un diablo, a veces un santo. Pero su nombre no cambia, y a ese nombre le atribuimos todo, lo bueno y lo malo.
Archipiélago Gulag, Alexander Solzhenitsyn".
Odie y ame este libro en partes iguales.
Realmente me destrozó el corazón, y cuando entiendes la portada, como que te da algo.
En este libro Nathan esta realmente fuera de si: descontrolado, haciendo estupideces y creyendo que es invencible.
Ya nadie puede razonar con el, y la verdad es que a muchos ya les da miedo su sola presencia.
Si los prejuicios hacia Nathan en el libro anterior eran muchísimos, sobretodo por su forma de luchar, aquí se van a otro extremo.
Realmente la gente ajena a Nathan no entiende como puede ser tan salvaje, tan frío y despiadado, y aquí entran los personajes que amo: los que lo defienden pese a todo.
Vemos a Greatorex, uno de los personajes que toma las riendas del campamento en el que se encuentran Nathan y Gabriel para entrenar a todos los que pueda.
La ame, porque siempre cree en Nathan, y le da lo mismo lo que diga la gente: es una buena líder.
Celia es otro de los personajes que me gustan mucho, pese a todo lo que pasaron ella y Nathan en el libro uno, siento que tanto en el Lado Salvaje como en este libro, se redime completamente: ella, de cierta forma se ve como responsable de Nathan.
Siente que le debe algo.
¿Y como no?
En fin, en este libro todos dependen de Nathan, pero ¿realmente les importa lo que pueda pasarle a el?
Gabriel, una vez más, intenta de hacer que abra los ojos y que se vayan a cualquier parte, a la que sea, pero que dejen todo atrás, y por una parte, encuentro que es lo mejor que podrían haber hecho, digo ¿es que acaso el protagonista no ha sufrido demasiado? ¿no es sano que uno se rinda de vez en cuando?
Pero Nathan, pensando eso mismo que dije, decide darles pelea a todos los que han sido injustos en su vida; a todos los que lo hicieron pasar un infierno, para que nadie más lo vuelva a pasar, pero también, por venganza.
"-Has estado fuera mucho tiempo. ¿Acaso estabas perdido?
-Herido, pero no perdido".
La venganza en este libro esta muuuy marcada, y aunque yo siempre he sido participe de que "la venganza nunca es buena, mata el alma y la envenena" como dice mi nona :3, aquí ese valor mío se va a la mierda jajaja.
Claro que ¿cuanto más va a perder Nathan por cumplir su venganza?
¿Realmente vale la pena?
Yo creo que no, hablando sentimentalmente.
"Quiero que hable conmigo, quiero ser normal. Pero no lo soy. No puedo serlo. Y todo es culpa de ella".
Me pasa que no si pueda culpar al 100% a Annalise, porque, si bien fue una estúpida e impulsiva, Nathan ya tenía todos esos tormentos desde antes, y Gabriel, siendo realistas, le dijo una y otra vez que ella solo veía su parte Blanca, y que nunca lo vio por como el era realmente: tanto blanco como negro.
"-...Estoy cansado de tu venganza, tu ira, tu odio. La guerra te está aniquilando. No a tu cuerpo, sino a tu mente, tu alma. Has cambiado. Siento que estoy perdiéndote. O estás perdiéndote a ti mismo[...] no necesitas nada de eso. Lo que necesitas es alejarte por completo. Regresar a la naturaleza como lo hemos hecho estos últimos días, antes de que la guerra te convirtiera en otra persona...en alguien malo".
Vemos mucha más tensión en este libro entre Nathan y Gabriel, porque, como mencione, la sed de venganza de Nathan lo están llevando a limites que nunca había cruzado, y Gabriel, siempre fiel, realmente ya no sabe que hacer para no perderlo, o para que el no se pierda.
Hubo muchas veces en las que le quería gritar al protagonista ¡Deja de ser un carbón con mi Gabriel, es el único que realmente te quiere y se preocupa por ti! Gilipollas...
"Temo que no te detendrás y te perderás por completo. Y luego yo también llegaré a temerte".
"Y luego recuerdo lo que podría hacer. Es fácil. Podría matarlos a todos".
Sobretodo porque muchas veces el mismo sabia que estaba haciendo algo mal, y sabia que se debería disculpar, pero le cueeeesta al hombre perder perdón. Vemos como se arrepiente de haber hecho ciertas cosas, y todas relacionadas con Gabriel y su conciencia y es como awww, los amo. Realmente.
Aparecen otros personajes en el transcurso, que hacen sacar el lado bueno de Nathan, y ¡Bang!, más traiciones. Hasta. Cuando. Por dios.
¿El chico trata de hacer las cosas bien, aunque sea a su manera atolondrada, y la gente a su alrededor sigue traicionándolo?
Parece tragicómico.
Sin duda es un libro buenísimo que te obliga a leerlo de principio a fin en un día: yo no lo pude soltar.
Y, al terminar, tuve que volver a leer ciertas partes una y otra vez, porque simplemente no me lo podía creer.
Es poético si lo piensas y le das más vueltas, pero te deja con esa sensación de vacío que se produce al terminar un libro especialmente bueno, con un final alucinante.
"-...en cualquier batalla, se presentan diversos problemas y que siempre se le podían ocurrir cincuenta cosas que podrían salir mal. El quincuagésimo primer problema era algo distinto del resto: siempre estaba ahí, pero era incapaz de pensar cuál podría ser".
"Hay un río y árboles y colinas bajas, y se oye el trinar de los pájaros, y el sol calienta mi piel. Es un lugar hermoso. Un lugar donde siempre soñé estar. Y estoy con Gabriel y él está conmigo".
